Sabemos que a veces reciclar puede parecer una gincana, si alguna vez te has visto
delante de los cubos sin saber a dónde va algo queremos que sepas que no eres el único.
Antes de que lo lances a un contenedor cualquiera es mejor que aprendas 4 cosas.
Y es que por muy buena intención que tengas, si no reciclas de forma eficiente no estás
reciclando.
Por suerte esto es mucho más sencillo de lo que crees.
Empecemos por lo más fácil:
Todos los envases de cartón se pueden reciclar (cajas de galletas, de cereales, de zapatos, de productos congelados, hueveras de cartón, etc) así como cualquier tipo de papel (periódicos, libros, revistas y bolsas de papel).
Aquí puedes depositar cualquier botella de vidrio, frascos de cosmética y de colonia, tarros de mermelada o de conservas.
Envases metálicos: Latas de conservas y bebidas, bandejas de aluminio, aerosoles, tapones metálicos de botellas y tapas de los frascos.
Bricks: Bricks de zumos, leche, vino, batidos, caldos, gazpacho, etc.
Envases de plástico: Botellas de agua, refrescos y leche. Productos de limpieza. Geles de baño, colonias y champú. Bolsas de congelados. Tarrinas de mantequilla y yogures. Bandejas de corcho blanco, envoltorios de plástico, bolsas de aperitivos y golosinas y las bolsas de plástico.
Aquí irán todos los residuos biodegradables de alimentos como cáscaras y pieles de frutas, restos de carnes, pescados, verduras, posos de café, restos de infusiones, etc.
También puedes tirar aquí todos desechos orgánicos como: papeles y cartón manchados de grasa o aceite, pequeños restos vegetales de flores y hojas, tapones de corcho y serrín.
Como su nombre indica, aquí irán los restos no reciclables, es decir chicles, pañales, toallitas húmedas, excrementos de animales, pelo y polvo recogido así como todo tipo de objetos estropeados (que no sean envases).
Los puntos limpios son lugares especiales donde se recogen de forma gratuita los residuos que, por su tamaño o peligrosidad, no se pueden depositar en los contenedores habilitados en la calle, como por ejemplo: electrodomésticos y aparatos electrónicos, escombros domésticos, CD’s, VHS, muebles y enseres, pinturas y barnices, restos de poda, etc.
También aceite doméstico, bombillas y fluorescentes, pilas y baterías, móviles y textil y calzado donde no haya sistemas de recogida específicos.
Por suerte esto es mucho más sencillo de lo que crees.
Empecemos por lo más fácil:
1
Al cartón, cartón
Todos los envases de cartón se pueden reciclar (cajas de galletas, de cereales, de zapatos, de productos congelados, hueveras de cartón, etc) así como cualquier tipo de papel (periódicos, libros, revistas y bolsas de papel).


¡OJO! Lo envoltorios de comida rápida si están rotos y llenos de
restos van al orgánico.
2
Al vidrio, vidrio
Aquí puedes depositar cualquier botella de vidrio, frascos de cosmética y de colonia, tarros de mermelada o de conservas.


¡OJO! Sin tapones ni tapas.
3
Al de envases, envases
Envases metálicos: Latas de conservas y bebidas, bandejas de aluminio, aerosoles, tapones metálicos de botellas y tapas de los frascos.
Bricks: Bricks de zumos, leche, vino, batidos, caldos, gazpacho, etc.
Envases de plástico: Botellas de agua, refrescos y leche. Productos de limpieza. Geles de baño, colonias y champú. Bolsas de congelados. Tarrinas de mantequilla y yogures. Bandejas de corcho blanco, envoltorios de plástico, bolsas de aperitivos y golosinas y las bolsas de plástico.


¡OJO! Los juguetes y cepillos dientes aunque sean de plástico no
son envases y debes tirarlos al contenedor de restos. Y en el
caso de que tuvieran mecanismos electrónicos, al punto limpio.
4
Todo lo orgánico, al marrón
Aquí irán todos los residuos biodegradables de alimentos como cáscaras y pieles de frutas, restos de carnes, pescados, verduras, posos de café, restos de infusiones, etc.
También puedes tirar aquí todos desechos orgánicos como: papeles y cartón manchados de grasa o aceite, pequeños restos vegetales de flores y hojas, tapones de corcho y serrín.


¡OJO! cuando recojas las pelusas y el polvo al de restos.
5
¿No se puede reciclar? Pues al de restos
Como su nombre indica, aquí irán los restos no reciclables, es decir chicles, pañales, toallitas húmedas, excrementos de animales, pelo y polvo recogido así como todo tipo de objetos estropeados (que no sean envases).

6
Todo lo demás, al limpio
Los puntos limpios son lugares especiales donde se recogen de forma gratuita los residuos que, por su tamaño o peligrosidad, no se pueden depositar en los contenedores habilitados en la calle, como por ejemplo: electrodomésticos y aparatos electrónicos, escombros domésticos, CD’s, VHS, muebles y enseres, pinturas y barnices, restos de poda, etc.
También aceite doméstico, bombillas y fluorescentes, pilas y baterías, móviles y textil y calzado donde no haya sistemas de recogida específicos.

Y todo esto ¿Para qué?
Solamente con separar los envases y deposítarlos en sus respectivos contenedores
ya estarás ayudando a mantener limpio el aire que respiramos, ya que reducimos
las emisiones de CO2 y además de ahorramos en materias primas y energía. Recuerda
que los recursos naturales no son infinitos y para que el ciclo del reciclaje funcione de
verdad se necesita de la colaboración de TODOS; ciudadanos, administraciones,
empresas… y el primer paso, empieza en tu casa.